Como consumidores, tenemos un rol clave en la preservación del medio ambiente. Cada elección de compra puede contribuir a un futuro más sostenible. Cuidar el planeta también está en nuestras manos, cada vez que consumimos.

 

Elegí productos que duren más, que se puedan reparar o reciclar. Llevá tu bolsa reutilizable, evitá los plásticos de un solo uso y apagá luces y artefactos cuando no los necesites. Ahorrá agua y elegí energías limpias siempre que puedas.

 

Reciclar, reutilizar y reparar son prácticas que prolongan la vida útil de los productos y disminuyen los residuos. Informarnos sobre el origen de lo que consumimos y elegir empresas comprometidas con el cuidado del planeta y que utilicen el greenwashing también es parte de un consumo responsable. Recordemos: cada acción cuenta para proteger nuestro entorno y garantizar un ambiente sano para las generaciones futuras.

 

¡Consumir con conciencia es un paso importante para un futuro más verde!